A través de esta línea de acción se ayuda a mejorar las condiciones de vida y de la integración social de las personas que sufren una discapacidad física o dificultad de movilidad por problemas en el aparato locomotor en el estado de Andhra Pradesh, distritos de Anantapur y Kurnool.
En la India sigue muy extendida la creencia de que las discapacidades, sean físicas o psíquicas, son el resultado de un “karma” o mal acto realizado en vidas anteriores, llevando a las familias a ocultar e ignorar a las personas que las padecen. Estos colectivos suelen ser arrinconados por el hecho de no poder contribuir a la economía del hogar como el resto de los miembros. Las mujeres sufren además una triple exclusión social: por género, por discapacitad y por casta.
El objetivo del programa para personas con discapacidad es reducir la intensidad de la discapacidad física de las personas afectadas, además de mejorar su autoestima, su autoconfianza y su integración social. Para ello se les garantiza el acceso a cirugías ortopédicas, se les proporciona medidas de apoyo como prótesis, muletas o sillas de ruedas y se les facilita servicios de rehabilitación, de manera que puedan desarrollar su actividad diaria de forma autónoma.
Este programa no busca solucionar problemas puntuales, sino desarrollar un proyecto de futuro que ofrezca igualdad de oportunidades mediante el enfoque en la base de la comunidad. Entre las distintas actuaciones que se llevan a cabo, cabe destacar la construcción de viviendas adaptadas, la creación de centros de educación especial para niñas y niños con discapacidades físicas o psíquicas y su integración en escuelas públicas, la concesión de microcréditos para actividades productivas y los talleres de ortopedia. Con este proyecto esperan atender a 9.000 personas en solo un año.
A Lakshmidevi, una de las personas beneficiarias del proyecto, sus piernas y su brazo derecho dejaron de funcionar cuando tenía sólo un año a causa de la polio. Ahora se ha convertido en la voz firme y fuerte de las personas con discapacidad de su pueblo y de su distrito, y es la confidente de muchos de sus vecinos que se acercan a su pequeño quiosco a comprar o a escuchar sus consejos.
“Cuando era pequeña era invisible para mi familia y para la sociedad. Pasaba los días encerrada en casa, sin hablar con nadie y sin amigos”.
Gracias a este programa para personas con discapacidad de la Fundación Vicente Ferrer, Lakshmidevi no sólo recuperó la autoestima y la confianza en si misma, sino que, además, se ha convertido en una empresaria y activista en su comunidad.
Tal y como ella misma dice “Juntos podemos conseguir lo que nos propongamos”.